miércoles, 17 de agosto de 2005

Signos

Soy una mujer resorte, con infinitas vueltas y subvueltas.
Capaz de estirarme hasta la estratosfera o aplastarme como papel carta vía aérea.
Convivir conmigo misma no es fácil.
Sobre todo cuando me da por rebotar de un afecto a otro.

Pero no puedo, no soporto amortiguarme en alguien.
En vano gasto saliva y sapiencia tratando de explicar mis instintos de alambre de púa, mis pensamientos en espiral.
A las mujeres resorte nadie las comprende. Ni los que tienen alma de colchón.
Me enredo en espasmódicas palabras regastadas.
Me crucifico en los cruces peatonales y te miro con ojos de semáforo.
"No entiendo", decís mientras la luz verde da paso y pasan geometrías de fragancias que fraguaron en tu nombre.
"Lo de siempre" contesto, y te dejo entre signos de pregunta sin respuesta.

No hay comentarios.: