Viajero incansable de bondades. Constructor de mi credibilidad. Señor de mis mañanas. Me desnudo de palabras, ensayo un alfabeto de caricias que solo Ud. comprenderá; idioma oculto entre los idiomas, casi secreto, casi verdadero amor.
Cómplices en cada encuentro, locos de Buenos Aires sin hospicio que nos enjaule; hacedores de posibles, responsables del incendio por mirarnos.
Sé como quisieras tenerme.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario